Retrospectiva de Luis Buñuel en la Cinemathèque Française, París
10 junio-2 agosto 2009

Dentro de la extensa retrospectiva que la Cinemateca Francesa de París le dedica al genial cineasta calandino Luis Buñuel, se proyectará los días 19 y 30 de julio el film documental Las Hurdes.Tierra sin pan, producido por Ramón Acín.

Ver PDF del programa.

Pedagogo revolucionador, coincidió con su amigo Luis Buñuel en un proyecto que reunía aspiraciones compartidas. Ya en París, en el año 1926, habían mantenido una intensa comunicación. Se desconoce el momento en que Buñuel y Acín habían hablado del proyecto de una película documental que trataría de un paraje verdaderamente altamirano. La comarca de Las Hurdes, situada entre tierras cacereñas y salmantinas, vivía en aquella época un retraso indescriptible. Esa imagen del retraso extremo cautivó a los autores del proyecto. En la línea ideológica y cinematográfica de Buñuel, un proyecto de estas características era coherente. Como lo era en los planteamientos pedagógicos y sociales de Acín.

No tenían el dinero necesario para realizar el proyecto y Acín, ante la falta de vías de financiación, prometió que si le tocaba la lotería costearía la película. Esa navidad de 1932 tocó el primer premio con el número 29.757 a decenas de oscenses, entre ellos a Ramón, que cumplió su promesa aportando no sólo el dinero (20.000 pesetas) sino también asumiendo junto a Rafael Sánchez Ventura las tareas de producción en tierras hurdanas.

…“Por ejemplo: a la casa donde vive Ramón Acín le dicen ya la casa de la moneda. En el caserón de corte y sabor de casa noble y antigua que mereció atención y descripciones de Ricardo del Arco, viven: En los bajos, Lucía Laborda y su hijo Santos Marrasé, peón de la brigada municipal. A los bajos llegó el gordo con su saquete de unos nueve o diez mil duros.
Arsenio Espín, procurador en el entresuelo. Cinco duros jugaba Arsenio. De Ramón ya se sabe que dio bastante pero de todas suertes –nunca mejor empleada la palabra- tendrá el obsequio de la Fortuna con unos veinticinco a treinta mil durazos”
(El Diario de Huesca, 24 de diciembre de 1932)

Durante el rodaje, Ramón Acín envió el 16 de abril de 1933 una tarjeta postal a su amigo Mario Mallén, farmacéutico del Hospital de Huesca, en la que le contaba:

“Querido Mario: Estoy hace unos días recorriendo Las Hurdes; si hubiera estado aún aquí el Dr. Albiñana, le hubiese saludado… en tu nombre
Si tuviese tu competencia sobre paludismo, cretinismo y demás ismos, te daría más detalles de esto.
Saluda a los amigos y queda tuyo tu amigo
R. Acín.”

Años más tarde, en la década de los 60, Buñuel escribiría a las hijas de Acín para devolverles el dinero.

El crítico zaragozano Francisco Aranda, especialista en Luis Buñuel, publicó este artículo sobre el film en un programa del Cine-Club S.E.U. de Salamanca.

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