Descripción
Escultura monumental consistente en dos pajaritas concebidas como figuras de papiroflexia que, frente una a la otra, están asentadas sobre sendos pedestales escalonados, .
Se halla instalada en el Parque Miguel Servet de Huesca desde 1929. La fuente ha sufrido modificaciones a través del tiempo. Así, tras en la Guerra Civil se eliminaron los pedestales escalonados. En 1986 se restauró y remodeló, devolviendo parcialmente el aspecto original.
La última restauración -a la que corresponde la imagen- fue inaugurada el 16 de julio de 2010, y supuso la recuperación del proyecto original ya que interpreta más acordemente los colores diseñados por Ramón Acín.
El monumento representa el espíritu de su creador, artista y pedagogo que siempre soñó con una ciudad, su ciudad, en la que los niños -y los adultos- tuvieran espacios de libertad y de vida.
El monumento a las pajaritas, pajaricas en primera nominación del escultor, ha sido enaltecido por críticos y artistas como representación de un arte sencillo pero conceptualmente potente, describiéndolo como ejemplo y anticipación de movimientos artísticos posteriores.